Roscón de Reyes relleno de nata
El Roscón de Reyes es uno de los dulces más emblemáticos de la Navidad en España, especialmente consumido el 6 de enero para celebrar la llegada de los Reyes Magos. Su origen se remonta a tradiciones romanas y medievales, y con el tiempo se ha convertido en un símbolo festivo cargado de ilusión. Aunque su elaboración requiere paciencia por los tiempos de levado, el resultado es un bollo esponjoso, aromático y festivo, que en esta versión se rellena de nata montada para hacerlo aún más irresistible.
Ingredientes
- 500 g de harina de fuerza
- 100 g de azúcar blanco
- 80 g de azúcar glass
- 25 g de levadura fresca
- 250 ml de leche
- 100 g de mantequilla
- 2 huevos
- 1 yema de huevo
- 30 ml de miel
- 20 ml de ron o anís
- 500 ml de nata para montar
- Ralladura de 1 naranja
- Ralladura de 1 limón
- Agua de azahar
- Esencia de vainilla
- Sal
- Cerezas confitadas
- Azúcar perlado
- Almendras laminadas
Preparación
- En un cuenco, disolver la levadura fresca en la leche templada. Reservar.
- En un bol grande, mezclar la harina, el azúcar, la ralladura de naranja y limón, y una pizca de sal.
- Añadir los huevos, una cucharada de agua de azahar, el ron/anís, la miel y la mezcla de leche con levadura. Mezclar bien.
- Incorporar la mantequilla poco a poco y amasar durante unos 10 minutos, hasta obtener una masa suave y elástica.
- Formar una bola, cubrir con un paño y dejar levar 2 - 3 horas, hasta que doble su tamaño.
- Desgasificar la masa y darle forma de roscón, dejando un agujero central amplio.
- Colocar sobre una bandeja apta para horno con papel vegetal, cubrir y dejar levar de nuevo 1 hora.
- Precalentar el horno a 180° C.
- Pintar el roscón con la yema de huevo.
- Decorar con las cerezas confitadas, las almendras laminadas y el azúcar perlado.
- Hornear durante 20 - 25 minutos, hasta que esté dorado.
- Sacar y dejar enfriar completamente.
- En un bol grande, montar la nata con el azúcar glass y una cucharadita de esencia de vainilla, hasta que esté firme.
- Abrir el roscón por la mitad, con mucho cuidado, y rellenar con la nata montada usando una manga pastelera. Cerrar de nuevo el roscón con mucho cuidado.
Nota:
La nata debe estar muy fría antes de montar para que adquiera la textura adecuada. El azúcar para decorar conviene mezclarlo con un poco de agua de azahar o anís.
Consejo:
Para conseguir un roscón más aromático, infusionar la leche con una rama de canela y una cáscara de naranja antes de añadirla a la masa.
Sugerencia:
Servir el roscón sobre una bandeja grande decorada con un poco de azúcar glass.



