Magdalenas
Las magdalenas son un clásico de la repostería española, presentes en desayunos y meriendas desde hace generaciones. Su origen se remonta a la repostería popular, donde con ingredientes sencillos se lograba un dulce esponjoso y aromático. Son habituales en panaderías y hogares, y se distinguen por su copete alto y su textura tierna. Aunque hoy en día existen muchas variantes, las magdalenas de siempre conquistan por su sencillez y por ese sabor que evoca la cocina de nuestras abuelas.
Ingredientes
- 4 huevos
- 250 g de azúcar
- 250 ml de aceite de girasol
- 250 g de harina de trigo
- 16 g de levadura química en polvo
- 60 ml de leche entera
- Ralladura de 1 limón
- Sal
Preparación
- Precalentar el horno a 200° C (calor arriba y abajo).
- En un bol grande, batir los huevos con el azúcar hasta que la mezcla blanquee y aumente de volumen.
- Añadir la ralladura de limón y el aceite poco a poco, sin dejar de batir.
- Incorporar la leche y mezclar.
- Tamizar la harina junto con la levadura y una pizca de sal. Incorporar suavemente a la mezcla anterior.
- Llenar las cápsulas de papel, previamente engrasadas, en moldes rígidos hasta 2/3 de su capacidad.
- Espolvorear un poco de azúcar por encima de cada magdalena.
- Hornear durante 15 - 18 minutos, hasta que estén doradas y con copete.
- Sacar y dejar enfriar sobre una rejilla antes de desmoldar.
Nota:
La ralladura de limón es opcional, pero es muy característica en la receta tradicional.
Consejo:
Para que tengan un copete alto, dejar reposar la masa en la nevera 30 minutos antes de hornear y hornear con calor fuerte al principio.
Sugerencia:
Servir en una bandeja de madera para un toque rústico. Acompañar con un café con leche o chocolate caliente.



