Bechamel para croquetas
La bechamel es una salsa algo espesa, cuyo origen se le atribuye a la cocina francesa e italiana. Se usa en la elaboración de una gran variedad de platos gratinados. Además, a lo largo de los años se ha empleado como base para otras salsas. Esta receta de bechamel para croquetas está especialmente adaptada para obtener la textura y consistencia ideal para preparar cualquier tipo de croquetas que requieran esta salsa. Es muy versátil, fácil y rápida de preparar.
Ingredientes
- 500 ml de leche
- 50 g de harina
- 50 g de mantequilla
- 15 ml de aceite de oliva
- 40 g de cebolla morada
- Pimienta negra
- Nuez moscada
- Sal
Preparación
- Pelar y picar bien la cebolla morada. Reservar.
- Calentar la leche en un recipiente. Reservar.
- En un cazo, calentar la mantequilla y el aceite a fuego suave, hasta derretir.
- Añadir la cebolla picada. Pochar unos 5 - 7 minutos.
- Agregar la harina. Remover durante unos minutos hasta obtener un "roux" con buena consistencia.
- Incorporar la leche caliente poco a poco. Remover para integrar bien.
- Salpimentar y rallar un poco de nuez moscada. Remover y mantener a fuego suave durante 20 minutos.
- Dejar templar y utilizar para el relleno de las croquetas.
Nota:
El "roux" es una masa o mezcla preparada con harina y mantequilla. Sirve de base para otras salsas o para espesarlas.
La cebolla morada es opcional.
Consejo:
La bechamel se debe cocinar durante 20 minutos para evitar el sabor de la harina, quedando una salsa más suave. En caso de quedar grumos, batir unos minutos con la batidora de mano hasta obtener una bechamel más fina.