Huevo
Las yemas no se conservan en el frigorífico más de 24 horas. Para que no se reseque la superficie es conveniente humedecerlas con agua y conservarlas herméticamente cerradas.
Para separar la clara de las yemas, conviene disponer de un cuenco de cocina y romper con suavidad sobre él los huevos. A continuación, separar las dos mitades vertiendo la clara en el cuenco y pasando la yema de un lado a otro de la cáscara.
No es aconsejable batir huevo en un recipiente o una cuchara plateados porque provoca que se oscurezca la yema.
Para conservar mejor el huevo conviene colocarlo en la huevera con la punta hacia abajo.Utilizamos cookies propias y de terceros para obtener datos estadísticos de la navegación de nuestros usuarios y mejorar nuestros servicios. Si acepta o continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Puede cambiar la configuración u obtener más información . Aceptar Cookies